Muchas veces los conductores buscan marcas que le generen confianza y que le aseguren una buena experiencia de conducción y cuando se produce una avería la asocian con defectos de fábrica. ¿Pero, sabías que los conductores pueden estar provocando estas averías? ¿Sabías que con unos buenos hábitos de conducción podemos evitarlas?
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Aquí os dejamos 5 malos hábitos que pueden dañar gravemente tu vehículo:
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1. Revolucionar mucho el motor en frío.
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Pasar de 0 a 120km/h puede ocasionar grandes averías en nuestro motor. Y es que deberíamos de conducir con suavidad por unos minutos para que el motor alcance una temperatura adecuada. En ese momento el aceite que lubrica el motor podrá fluir correctamente. Este mal hábito puede hacer que la durabilidad de nuestro motor disminuya considerablemente.
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2. Apurar el depósito de combustible hasta la reserva.
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Muchas veces queremos exprimir hasta la última gota de combustible, pero este mal hábito puede costarnos una gran avería.
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Cuando los niveles de combustible son muy bajos, la bomba tiene que hacer un sobreesfuerzo para poder absorberlo, además, se pueden generar burbujas de aire que impidan la correcta refrigeración de ésta. Además con el tiempo el combustible va creando sedimentos en el fondo que pueden ser absorbidos y provocar que se atasque en el filtro, e incluso llegar a los inyectores.
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Y lo peor de todo, ¡puedes quedarte sin combustible en plena carretera y ocasionar un accidente!
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3. Cuidado con el turbo.
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Otro hábito común es detener el motor de golpe tras realizar una parada. Si tienes un motor con turbo debes dejar reposar el motor unos segundos antes de pararlo para que la turbina baje de revoluciones y pueda enfriarse y lubricarse adecuadamente.
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4. Pisar constantemente el pedal de embrague.
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Muchos conductores tienen el mal hábito de dejar el pie constantemente en el pedal del embrague. Con esta acción se pueden producir fricciones en el disco, y exige al resto del mecanismo hacer un esfuerzo innecesario.
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Por lo que:
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– Evita apoyar el pie en el embrague, y ponlo en el reposapiés a la izquierda.
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– Cuando estés en un semáforo en rojo, pon el coche en punto muerto.
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– Cada vez que cambies de marcha, pisa hasta el fondo.
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5. Pasar con alta velocidad, badenes y resaltos.
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Es muy común en las carreteras españolas encontrarnos con badenes, por ello tenemos que tener mucho cuidado y pasar a baja velocidad. De lo contrario podemos dañar el chasis, muelles, amortiguadores incluso las llantas de nuestro vehículo.
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¿Sabes de alguien que está cometiendo éstos malos hábitos? ¿Intentarás, de ahora en adelante cambiarlos?
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Aquí os dejamos 5 malos hábitos que pueden dañar gravemente tu vehículo:
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1. Revolucionar mucho el motor en frío.
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Pasar de 0 a 120km/h puede ocasionar grandes averías en nuestro motor. Y es que deberíamos de conducir con suavidad por unos minutos para que el motor alcance una temperatura adecuada. En ese momento el aceite que lubrica el motor podrá fluir correctamente. Este mal hábito puede hacer que la durabilidad de nuestro motor disminuya considerablemente.
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2. Apurar el depósito de combustible hasta la reserva.
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Muchas veces queremos exprimir hasta la última gota de combustible, pero este mal hábito puede costarnos una gran avería.
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Cuando los niveles de combustible son muy bajos, la bomba tiene que hacer un sobreesfuerzo para poder absorberlo, además, se pueden generar burbujas de aire que impidan la correcta refrigeración de ésta. Además con el tiempo el combustible va creando sedimentos en el fondo que pueden ser absorbidos y provocar que se atasque en el filtro, e incluso llegar a los inyectores.
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Y lo peor de todo, ¡puedes quedarte sin combustible en plena carretera y ocasionar un accidente!
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3. Cuidado con el turbo.
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Otro hábito común es detener el motor de golpe tras realizar una parada. Si tienes un motor con turbo debes dejar reposar el motor unos segundos antes de pararlo para que la turbina baje de revoluciones y pueda enfriarse y lubricarse adecuadamente.
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4. Pisar constantemente el pedal de embrague.
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Muchos conductores tienen el mal hábito de dejar el pie constantemente en el pedal del embrague. Con esta acción se pueden producir fricciones en el disco, y exige al resto del mecanismo hacer un esfuerzo innecesario.
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Por lo que:
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– Evita apoyar el pie en el embrague, y ponlo en el reposapiés a la izquierda.
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– Cuando estés en un semáforo en rojo, pon el coche en punto muerto.
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– Cada vez que cambies de marcha, pisa hasta el fondo.
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5. Pasar con alta velocidad, badenes y resaltos.
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Es muy común en las carreteras españolas encontrarnos con badenes, por ello tenemos que tener mucho cuidado y pasar a baja velocidad. De lo contrario podemos dañar el chasis, muelles, amortiguadores incluso las llantas de nuestro vehículo.
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¿Sabes de alguien que está cometiendo éstos malos hábitos? ¿Intentarás, de ahora en adelante cambiarlos?
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